A pesar de haber recibido la invitación formal por parte de la Organización, no ha sido posible por problemas de tiempo (compromisos adquiridos por el club) y presupuestarios (ya que los jugadores al no ser profesionales trabajan y además habían acabado la temporada oficial) el participar en un torneo que a buen seguro habría servido para demostrar la mejora del futsal japonés, una vez ha comenzado una competición estatal y de nivel como la F. League.
No queda más que conformarnos con ser meros espectadores y luchar para que el año próximo sea una realidad nuestra participación.
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